Con los muebles y los electrodomésticos instalados, la cocina ya tiene el aspecto definitivo a falta de la encimera de porcelánico.
Se puede apreciar el espacio y la luminosidad que aporta la nueva disposición, así como el contraste de color entre elementos.
No solamente se ha ganado en aspecto visual, con una cocina más moderna, sino que se ha ganado en espacio habitable y de almacenamiento sin necesidad de ampliar la cocina. La correcta disposición de los muebles y los electrodomésticos es un factor clave en una reforma de cocina.